Es que no eres un artista, sino un proselitista violento.
Trolear o no trolear... he ahí el dilema. ¿Y qué puede ser más levantado para el espíritu? ¿Poner la otra mejilla cuando se recibe una bofetada, o contestar al abusivo con un puñetazo de la misma proporción del que se recibió? Quizá resulte mejor engañar al enemigo, sentarse a llorar para su beneplácito, para que se confíe y entonces, aprovechar el momento propicio para darle una buena puñalada por la espalda...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Prueba
ResponderEliminarA ver, he quitado los bloqueos a las cokies. En Youtube funcionó, espero que también aquí. Veré si sube este comentario y, una vez más, Francy Dorough, gracias por tu atención.
Eliminar